Hola hijo, soy tu padre, ese ser
que a veces parece que fue enviado a la tierra para molestarte, prohibirte,
regañarte, marcar tus errores y notar tus defectos, impulsarte a que seas
mejor, aunque no siempre lo haga de la mejor manera. Soy tu padre, nadie me
educó para serlo. Un buen día te cargaba en mis brazos y me dije que llegarías
mucho más alto que yo, no importando lo que tuviera que hacer. En ocasiones me
descubro cuestionándome en las noches mientras te observo dormir sobre si estoy
haciendo bien mi trabajo, si te hubiera dado ese permiso, si te habré escuchado
lo suficiente, si en mi intento por darte todo te estoy haciendo infeliz. El
amor consiste en la preocupación activa por la otra persona y eso define lo que
siento por ti. Te amo, aunque no siempre lo diga. Te amo aunque a veces parezca
lo opuesto. Te amo y eso es todo lo que sé. Puede parecer una que otra vez que
quiero y busco tu infelicidad, la verdad es que lo que ves es mi miedo a que te
lastimes o alguien más lo haga. Quisiera saberlo todo para ahorrarte ese pesar,
quitar cada piedra en tu camino y aplastar aquellas que te puedan herir. Pero
ese es trabajo tuyo. Yo soy una especie de guía que va en un camino diferente,
de donde te veré y me desviaré un momento del mío para que tú sigas con
seguridad el tuyo. Te amo, mi compañía de andares.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Bonito, tambien. :)
ResponderEliminarGracias.
EliminarMUY LINDO
ResponderEliminarlindo mensaje para refleccionar que ser padre en lo bueno y lo malo que te espera en la vida para superalo y segir luchando por nuestros hijos
ResponderEliminarWooow verdadero y hermoso
ResponderEliminar