Google

miércoles, 18 de septiembre de 2013

MIS DÍAS SIN TI

Hoy desperté extrañándote como nunca y deseándote más que siempre. Tu recuerdo comenzó a buscarme, yo a huir, pero al final me atrapaste. Quité las delgadas sábanas que nos separaban, tu recuerdo me acaloraba. La contemplación de tu mirada me dijo qué y cómo ocurriría, mientras tu sonrisa se torcía un poco, me miraste con malicia y sentí temor, pero de que no fueras real. Para no pensar en la locura, me apresuré a tocarte y a desnudarte, como con hambre.

Comencé a recorrer los senderos de tu cuerpo, donde alguna vez estuve, recordando. Mantuviste tu distancia, sólo admirando como mis manos dibujaban en tu cuerpo. Te recorrí, mi lengua y mis manos eran los vehículos, tu silueta mi territorio y destino. El cuarto se transformó, ya no era él, sino un templo de contemplación de tu perfección. Tus manos poseyeron las mías para recorrer mi cuerpo y reclamarlo como suyo. Comenzó un vórtice de sensaciones y emociones donde me perdí y desorienté: arriba y abajo estabas tú, afuera y al centro también, dominabas todo lo visible e invisible.

Las palabras se tornaban silencios, éstos se volvían suspiros y gritos en ciertos momentos. Mi vientre ardía en deseos, mi pecho quemaba de pasión y mis labios estaban sedientos de los tuyos, de tu cuello, de tu vientre, de tu ombligo y de la parte tuya donde explotan tus sentidos. De pronto ya no estábamos completos, sólo éramos labios, sólo éramos pechos y piernas, sólo éramos esas partes que sentían, el resto desapareció, era innecesario y se fue.

Fuego se apoderó de mí, creí que moriría en ese incendio, pero dejé que continuara. El fuego crecía y los silencios se hacían menos, luego el cuerpo en llamas y ojos apretados eran todo, la oscuridad inundaba la habitación y después muchos colores aparecieron. El último grito que acabó con todo silencio posible, sólo en eco había quedado.

Mi cuerpo era ligero y comenzó a relajarse cada vez más, ya no te encontraba, pero tardé en preocuparme por eso, una suave brisa entró por la ventana y mis sentidos comenzaron a reaccionar, a notar tu ausencia y cuestionar que hubieras estado aquí. No, no estabas, sólo estaba yo y esas ganas de tenerte siempre y ese llanto de sentirte lejos. Así es mi día sin ti, deseos en el desayuno, la comida y la cena y hambre de ti en ayunas. Así pasan mis días sin tu calor, sólo basta soñar contigo para poder hacerte el amor sin tenerte. Y seguro que mañana, de nuevo, te extrañaré más que nunca y te desearé igual que siempre.


All by Sergio Vergara.

domingo, 11 de agosto de 2013

MÁS DE TI

Quiero más de ti. Más que un sueño, más que un deseo, más que la vida envuelta en misterios sobre qué harás cuando no te veo y que hago con las horas vacías en que no estás.
Quiero de ti más que esa mirada furtiva que escapa de mi descubrimiento, más que sólo la idea de que existes. Deseo comprobar que no eres una proyección de mis más profundos deseos, un sueño en vigilia o un error de mi mente. Quiero realidad.
Quiero ser quien eclipse el sol cuando despiertes, tu amoroso despertador, quien observe que tu descanso sea tranquilo. Muero por ser la última cara que observes antes de que sueños de mí te inunden. Deseo ser el motor de tus carcajadas y el guardián de tus alegrías.
Mi destino es ser tu confidente, tu benefactor en caricias, tu proveedor de ternura, la ruta de cuerpo, el final de tu búsqueda. Porque mis deseos obedecen a algo más que una obsesión por ser tu todo, es más bien una sincera preocupación por que seas tan feliz como puedes serlo.
Quiero eso y más. Más de tu tiempo, más de tu espacio, más de tu vida, de tu pensar. Quiero secar tus lágrimas y aliviar tus penas, amo tu risa tanto como tus mohines. Quiero también tu silencio y tus enojos, tus virtudes y tus defectos. Quiero más, siempre más, pero más de ti.


All by Sergio Vergara.


YA NO SÓLO LO LEAS, TAMBIÉN ESCÚCHALO Y SUCRÍBETE A MI CANAL PARA MÁS.

SÍGUEME EN:

viernes, 9 de agosto de 2013

MENDIGO DE TU AMOR

Dime que hay algo, no importa que no haya nada, de mentiras sé vivir.
Por un poco de tu atención yo río, lloro, subo, bajo, avanzo y retrocedo.
Un mendigo soy de tu cariño, dame ese poco que te sobre,
todo aquello que nadie más quiera, cualquier cosa que te estorbe.
Bien dicen por ahí: La basura de una persona es el tesoro de otra.
Si tu nada ha sido siempre mi todo y he comido feliz de un plato vacío;
a tu nada he dedicado mi tiempo, mi espacio, mis sueños y anhelos.
Imagina qué haría si dijeras que hay algo: migas para el famélico,
esperanza para el desahuciado, agua para el sediento, amor para mí.
Si por nada hago todo, no sé si mis fuerzas resistan el todo, di que hay algo.
Porque por un algo daría mi vida entera: vivo, muero y resucito por un algo.


All by Sergio Vergara.


YA NO SÓLO LO LEAS, TAMBIÉN ESCÚCHALO Y SUCRÍBETE A MI CANAL-

SÍGUEME EN:

jueves, 1 de agosto de 2013

DUEÑOS Y ESCLAVOS


¿Cómo saber si te poseo o me posees?

Hacerte o que me hagas el amor es una ocasión en que se da y se quita, algo se transforma, algo se trasfiere y, de alguna manera, ya no eres ni soy la misma persona. Pero no sé si me entrego o si dejo de ser de mi propiedad, en el momento en que te permito tocarme en esa forma especial en que lo hacen los amantes. ¿Es el acto un evento que me confiere derechos sobre tu cuerpo o tu persona, mientras transfiero los derechos de propiedad sobre mí a ti?

Porque me siento tuyo y te siento de mí. Porque cuando te beso mi vida se detiene y se convierte en tiempo de ti. Porque tanto aclamaba mi libertad y ahora tiemblo si no te siento cerca exigiendo mi cuerpo y mis espacios. Porque mi vida ya no es representada por mi solo nombre, sino que requiere el tuyo para tener algún sentido.

Ahora soy un ser incompleto, que perdió parte de sí el día que se distrajo mirándote. Robaste mi alma sin siquiera quererlo, sin tener conocimiento de eso. No sabía que los ladrones pudieran ser bandidos contra su voluntad. Tampoco que el ultrajo sería extrañamente placentero. Pero ocurrió, me robaste y ahora temo ser libre de nuevo, sin ti.

¿Cómo saber quién posee a quién? ¿O qué pertenece a quién? Si entre el calor de los cuerpos y el fuego de nuestra pasión se funde todo. Si en el acto todo nos exigimos y todo nos quitamos, sin convertirnos en ladrones o víctimas. Si en el mar de cuerpos reclamando y besando todo se confunde, como vórtice de miembros sin dueño aparente. Si con cada movimiento, cada vuelta, cada abrazo y cada caricia ya no se sabe qué es tuyo y qué es mío, dónde empiezo yo y terminas tú, porque todo es nosotros. Porque ahí nada tiene sentido, ni necesidad hay que lo tenga y la única verdad flotando, entre el efluvio de pasión que nos envuelve, es que somos dueños y esclavos de este amor.



All by Sergio Vergara.

SÍGUEME EN:

sábado, 1 de junio de 2013

EL JUEGO

¿Y si jugamos a mentirnos?
Juguemos a pensar que el otro trascenderá su espíritu,
a que nos adoraremos más allá de la eternidad,
dirás que soy lo mejor que ha pasado por tu historia,
que serías capaz de surcar cualquier odisea por verme
y que el resto de las personas son inferiores a mí.
Júrame que tu cariño es más grande que el infinito.

Pensemos en grande, una mentira insuperable.
Yo fingiré que ya no puedo pensar en nadie
y tú me dirás que nada en tu pasado importa ya.
Nos diremos que ya nada ni nadie nos puede separar,
haciendo oídos sordos a la experiencia de la humanidad.
Engañemos, juguemos, finjamos, prometamos otro día más,
incluso en los días en que estés lejos siquiera de fingir interés.
Di palabras en automático, recurre a lo dicho antes, está permitido.

Yo prometo creerte fielmente, hasta cuando mientas mal.
Necesitamos este juego de mentiras intergeneracional.
Es un juego simple y divertido, pero no siempre termina bien.
Para jugar se necesita de dos personas que olviden el juego,
se requiere una necesidad de apego, de trascendencia y calor.
Si aceptas jugar prometo ser el mejor jugador que has visto.
Su nombre es bien conocido. Por consenso le llaman Amor.


All by Sergio Vergara.

SÍGUEME EN:

jueves, 21 de febrero de 2013

ILUSIONES


Ya no quiero una ilusión,

verte y soñarte toda la noche, oírte y temblar por ti, verte marchar y llorar otra vez.

Ya no quiero una ilusión,

pensar en mundo posibles, engañarme con que piensas en mí y frenar así mi vida.

Ya no quiero una ilusión,

Jugar a que me quieres, fingir que te creo, danzar entre mentiras, rogarte por un beso.

Renuncio a la ilusión,

último beso a tu recuerdo, las postreras palabras hacia ti, el adiós matizado de olvido.

Renuncio a esta ilusión,

a las palabras nunca dichas, a los besos no entregados, a ti. Bienvenida la cordura.


All by Sergio Vergara.


YA NO SÓLO LO LEAS, TAMBIÉN ESCÚCHALO Y SUCRÍBETE A MI CANAL PARA MÁS.

SÍGUEME EN: